El gobierno de Estados Unidos comenzó a cerrar operaciones tras la medianoche del miércoles, debido a la falta de acuerdo entre legisladores y el presidente Donald Trump, quienes no lograron superar un estancamiento presupuestario en el Congreso. La disputa se centra en las exigencias demócratas para financiar programas de salud, en especial el Obamacare.
Este es el primer cierre o “shutdown” desde el más largo en la historia de EE.UU., que duró 35 días, ocurrido hace casi siete años. La parálisis detendrá las actividades de numerosos departamentos y agencias federales, afectando a cientos de miles de empleados gubernamentales.
Trump Culpó a los Demócratas y Amenazó con Consecuencias
El presidente Trump culpó a los demócratas del estancamiento y amenazó con castigar al partido, alegando que la interrupción afectaría a los votantes demócratas debido a recortes masivos en el sector público. «Estaríamos despidiendo a muchas personas que se verán muy afectadas. Y son demócratas, van a ser demócratas», afirmó Trump desde la Oficina Oval.
A pesar de los intentos de los republicanos del Senado de aprobar un parche de financiación temporal aprobado por la Cámara de Representantes, no lograron obtener los votos necesarios de los demócratas para enviarlo al escritorio del presidente Trump. “Podemos hacer cosas durante el cierre que son irreversibles, que son malas para ellos… como despedir a una gran cantidad de personas”, añadió el mandatario.
Impacto en los Empleados Federales: Desempleo Parcial y Pérdidas Económicas
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), 750.000 empleados federales podrían enfrentar desempleo parcial, con una pérdida de ingresos estimada en 400 millones de dólares. Este cierre podría tener un impacto negativo en la economía, similar al ocurrido en 2018, cuando se registró una caída del Producto Interno Bruto (PIB) de 11.000 millones de dólares debido al cierre anterior, que duró 35 días.
El impacto es especialmente crítico porque estos cierres son altamente impopulares, y tanto demócratas como republicanos intentan evitarlos hasta el último momento, especialmente con las elecciones legislativas de mitad de mandato en noviembre de 2026, donde se pone en juego la mayoría en el Congreso.
Posiciones Contrapuestas: La Disputa por la Financiación de Salud
Los republicanos habían propuesto extender el financiamiento actual hasta finales de noviembre, mientras se negociaba un plan de gasto más largo. Sin embargo, los demócratas querían restituir cientos de miles de millones de dólares en gastos para atención médica, especialmente para el programa de seguros de salud Obamacare, dirigido a hogares de bajos ingresos.
El lunes, Trump recibió en la Casa Blanca a los principales líderes republicanos y demócratas del Congreso, pero la reunión no logró resolver el estancamiento. Hakeem Jeffries, líder de la minoría demócrata en la Cámara de Diputados, afirmó: “Tenemos la voluntad y la capacidad de encontrar un acuerdo bipartidista para financiar al Estado de una manera que responda a las necesidades del pueblo estadounidense en materia de salud”. Sin embargo, dejó claro que los demócratas no apoyarían un proyecto de ley republicano que “desmantelara el sistema sanitario estadounidense”.
Sin los Votos Necesarios para Aprobar el Presupuesto
A pesar de que los republicanos tienen mayoría en el Senado, no cuentan con los 60 votos necesarios para aprobar un presupuesto. Actualmente, el partido de Trump está corto en 7 votos para cumplir con los requisitos establecidos para la legislación presupuestaria.
El cierre del gobierno no tiene fecha definida, y la duración del mismo es incierta. Desde 1976, el gobierno federal se ha cerrado 21 veces debido a desacuerdos presupuestarios.