Un juez en Florida ordenó ayer jueves que un niño de 12 años quede detenido por 21 días en una instalación de arrestos en espera de una audiencia este mes, dos días después de que él y una niña de 14 años irrumpieron en una casa, donde encontraron armas de fuego y balas y dispararon contra policías en un tiroteo que terminó con la niña herida.
En una audiencia virtual, el juez Michael Orfinger le dijo al niño que enfrentaba cargos de intento de asesinato de un agente del orden y robo armado de morada.
“He revisado el reporte de arresto y basado en mi examen, existe causa probable de que esos actos ocurrieron y de que eres la persona que los cometió”, dijo Orfinger.
En silencio
El juez nombró a un abogado público para representar a niño, quien mantuvo silencio y se vio ligeramente aturdido en la audiencia de siete minutos.