El gobierno del presidente Joe Biden está tomando la ofensiva contra políticos que diseminan desinformación sobre las vacunas contra el coronavirus y que critican los esfuerzos de ir de casa en casa para inocular a la población.
Durante meses el gobierno de Biden se ha abstenido de criticar a los republicanos que han tratado de minimizar la importancia de las vacunas, pero en momentos en que se está aletargando la campaña de vacunación, la Casas Blanca está saliendo al contraataque contra quienes intentan sembrar miedo sobre las inyecciones.
Cuando el gobernador de Carolina del Sur Henry McMaster intentó frenar la campaña de enviar gente de casa en casa para aumentar la tasa de vacunación en su estado, la secretaria de prensa de la casa Blanca Jen Psaky fue enfática:
“La negativa de dar información válida sobre salud pública, como la eficacia de las vacunas y su accesibilidad en todo el país, incluyendo en Carolina del Sur, está literalmente causando muertes, así que quizás deberían pensar en ello”, declaró Psaki.
Al inicio de la administración Biden, la Casa Blanca por lo general se abstuvo de criticar a funcionarios estatales o locales por su manejo de la pandemia, a fin de evitar roces y evitar la politización de la salud pública.
Pero el tono cambió recientemente cuando políticos republicanos criticaron a Biden por pedir una campaña de ir de casa en casa para entregar información sobre las vacunas con la esperanza de que ello aumente la tasa de vacunación.
“Tenemos que ir de comunidad en comunidad, de vecindario en vecindario e incluso a veces de casa en casa, literalmente tocando puertas, para ayudar a los que faltan”, expresó el mandatario.
Pero algunos políticos republicanos objetaron, como McMaster, el representante por Ohio Jim Jordan, el gobernador de Missouri Mike Parson y el fiscal general de Arizona Mark Brnovich.
“A esos individuos y organizaciones que están propagando desinformación y tratando de desprestigiar esta labor de ir en casa en casa: creo que le están haciendo un mal servicio al país, un mal servicio a los médicos, a los líderes religiosos, a los líderes comunitarios y a los demás que están tratando de promover la vacunación para salvar vidas y ponerle fin a esta pandemia”, declaró Jeff Zients, coordinador de la Casa Blanca para temas de la pandemia.